La Ley 21.643, comúnmente conocida como “Ley Karin”, representa un avance significativo en la legislación laboral chilena al abordar de manera integral la prevención, investigación y sanción del acoso laboral y la violencia en el trabajo. Promulgada en enero de 2024 y con vigencia a partir de agosto del mismo año, esta ley se inspiró en el lamentable caso de Karin Salgado, una funcionaria de salud que sufrió acoso laboral hasta el punto de quitarse la vida. La normativa busca no solo honrar su memoria, sino también establecer un marco legal sólido que garantice la seguridad y el respeto en todos los espacios laborales, tanto en el sector público como privado.

La Ley Karin obliga a las empresas a adoptar medidas concretas para prevenir riesgos psicosociales, promover la salud mental y el bienestar de sus trabajadores, y asegurar que las relaciones laborales se desarrollen en un ambiente libre de violencia y discriminación, con un fuerte enfoque en la perspectiva de género. Esta ley no solo introduce modificaciones importantes en el Código del Trabajo, sino también en otros cuerpos legales como la Ley Orgánica Constitucional sobre Bases Generales de la Administración del Estado. Entre sus principales innovaciones, se incluye la obligación de implementar protocolos específicos para la prevención y actuación frente a situaciones de acoso laboral, acoso sexual y violencia en el trabajo, así como la incorporación de causales de destitución para quienes incurran en estas conductas.